Seis años después del anuncio de Project Glass, con las que Google se lanzaba a la incorporación de la realidad aumentada en un wearable de uso diario, y tras el fracaso posterior del mismo, la compañía volvió a relanzar sus Google Glasses en 2017, esta vez solo para empresas, lanzó una nueva versión en 2019 y en 2020 ha adquirido la compañía North, una empresa de gafas inteligentes canadienses, una señal de que siguen apostando por esta tecnología.

En esta entrada vamos a explicar qué son y para qué sirven las Google Glasses, cómo les afecta la protección de la privacidad, y ver cuál su situación actual.

¿Qué es una Google Glass y para qué sirve?

Google Glass es un dispositivo de realidad aumentada creado por Google bajo el nombre Project Glass. Se trata de unas gafas, con o sin cristales, que llevan incorporado un miniproyector que proyecta directamente al ojo una imagen virtual que se superpone sobre la imagen real que tenemos delante.

Su intención inicial era permitir a sus usuarios utilizar aplicaciones de forma similar a como lo hacemos en un smartphone, pero sin usar las manos, ya que funcionan mediante comandos de voz. Por ejemplo, podían mostrarnos un mapa de Google Maps ante nuestros ojos para poder seguirlo, sin necesidad de llevar el móvil en la mano. Es decir, a través de la Google Glass tenemos acceso a Internet y nuestro smartphone, gracias a su conectividad Wi-Fi.

Tras varios cambios y quedar a solo estar disponible para las empresas y, por tanto, destinadas a un uso profesional, Google Glasses se emplean en diferentes áreas, como la medicina, la arquitectura, la educación, la industria, la construcción, etc. Recientemente han dejado de estar dentro de Google X, el laboratorio de desarrollo de nuevas tecnologías de Google, para convertirse un producto oficial con el lanzamiento de 2019 de Google Gasses Enterprise Edition 2.

Google Glass 2020

Google Glasses Editions, del fracaso al éxito

El camino de Google Glasses ha sido de todo menos fácil. Cuando se presentaron en 2013, supusieron una pequeña revolución en el campo de la realidad aumentada en wearables. Sin embargo, aquellos primeros modelos no llegaron alcanzar el éxito esperado, sino todo lo contrario, supuso un aparente fracaso para Google Glasses, y decimos aparente, porque las gafas de Google volvieron a levantar cabeza haya por 2017, con un modelo destinado solo para empresas, que ahora en 2020 son ya un producto oficial.

¿Por qué fracasó el primer proyecto «Google Glass»

Aunque el comienzo de Gloogle Glasses fue prometedor, la compañía se había adelantado al resto con el anuncio de esta nueva herramienta, lo cierto es que estas gafas de realidad aumentada no llegaron a alcanzar el éxito que se esperaba de ellas.

En parte tuvo que ver el precio de las mismas, 1.500 dólares, también se vieron afectadas por las dudas sobre la privacidad que presentaban, ya que incorporan una cámara de fotos y vídeo, que permitía grabar en cualquier momento y en cualquier lugar, por lo que se prohibió su uso en muchos establecimientos. Finalmente, quizás también salieron «demasiado pronto» a un mercado que todavía no tenía demanda para ellas. Todo esto propició que las Google Glasses fueran un fracaso y que cayeran en el olvido para el gran público. Sin embargo, Google no las abandonó.

¿Qué cambios introduce «Google Glasses Enterprise Edition 2»?

Como decíamos, Google lanzó en 2017 las Google Glasses Enterprise Edition, cambiando su estrategia para las gafas, que pasaban de ser un producto para el gran público, a solo estar disponibles para empresas, centradas en tareas específicas.

Google ha seguido trabajando en las gafas, aunque de manera bastante privada, puesto que en 2019 llega por sorpresa una nueva generación de estas gafas con Google Glasses Enterprise Edition 2.

Es nueva evolución llegó con nuevos componentes, nuevo diseño, una batería de mayor duración y un nuevo precio. Eso sí, su venta sigue estando restringida a empresas.

Con este nuevo modelo, Google entra a competir en el sector profesional con las HoloLens de Microsoft.

Cambios Google Glasses Enterprise Edition 2

Analizamos las Google Glasses Enterprise Edition 2

Las Google Glasses Enterprise Edition 2 incorporan un nuevo procesador Snapdragon XR 1 de Qualcomm, lo que permite la compatibilidad con visión computerizada y machine learning (una de las ramas actuales de desarrollo de Inteligencia Artificial). Este procesador reduce también el consumo de batería de las gafas y las hace más potentes. Además, son compatibles con el kit de desarrollo de Android y el Android Enterprise Mobile Device Managment, por lo que las empresas pueden desarrollar sus propias aplicaciones de una forma mucho más sencillas.

Este nuevo modelo ofrece la proyección de las imágenes en el módulo disponiendo de control multitoque. Se pueden conectar con un smartphone, pero también pueden trabajar de manera autónoma. Cuentan con conexión Bluetooth y Wi-Fi y una versión Android adaptada a ellas, concretamente Android 8 Oreo.

También se ha mejorado la cámara, su batería permite carga rápida, incluyendo un puerto USB-C y cuentan con LED para la privacidad.

En cuanto a diseño, el nuevo modelo presenta un aspecto más clásico, con montura DE plásticos, que incluye protección en los laterales de cada lente, aunque también sigue estando disponible la montura al aire.

¿Qué especificaciones tienen?

Si nos vamos a las especificaciones, esto es lo que nos encontramos en Google Glasses Enterprise Edition 2:

  • Procesador: Qualcomm XR 1 de 4 núcleos a 1,7 GHz, fabricado en 10 nm (nanómetros).
  • Módulo de pantalla: Óptico con resolución de 640 x 360 píxeles.
  • Memoria RAM: 3 GB.
  • Almacenamiento: 32 GB eMMC.
  • Cámara: 8 Mpx.
  • Conexiones: USB-C 2.0, Bluetooth 5.0, Wi-Fi de doble banda.
  • Batería: 820 mAh.
  • Versión de Android: Oreo.
  • Peso: 46 gramos.
  • Además tiene resistencia al polvo y el agua, touchpad multitoque, altavoz mono y audio USB.

¿Qué funcionalidades tiene?

Dato que el uso de las Google Glasses Enterprise Edition 2 está destinado únicamente a empresas, sus funcionalidades están orientadas a la incorporación de aplicaciones para el desempeño profesional, que pueden variar de una empresa a otra. Además, como ya hemos comentado, gracias a su compatibilidad con el kit de desarrollo de Android, las empresas pueden crear sus propias aplicaciones, para cubrir las necesidades que demande su actividad con el empleo de estas gafas.

Aparte, también permiten el acceso a las aplicaciones desarrolladas propiamente para las Google Glass y con ellas se puede acceder a Internet sin necesidad de utilizar el móvil para ello. Además, cuenta con el asistente inteligente Google Now.

Las Google Glasses tienen una pequeña cámara frontal que permite realizar fotografías y vídeos en alta definición (720p HD), que pueden se pueden enviar o retransmitir vía streaming. Incorporan Google Hangouts, por lo que se pueden emplear en videoconferencias, y podemos usarlas también como navegador.

¿Qué precio tienen estas nuevas gafas inteligentes?

Actualmente, el precio de las Google Glasses Enterprise Edition 2 es de 999 dólares, lo que ha supuesto una bajada del precio con el que las primeras Google Glasses salieron a la venta. Aunque ese el precio base, puesto que dependiendo de los accesorios y las monturas, pueden salir algo más caras.

¿Cuando salen a la venta?

Las Google Glasses Enterprise Edition 2 llevan a la venta desde 2019, aunque solo se pueden adquirir a través de los partners de Google y solo en el supuesto de que el comprador sea o forme parte de una empresa. Es decir, que todavía no están accesibles para el resto de usuarios.

Trabajador usando google glasses

La Privacidad de las Smart Glasses

Como ya señalamos más arriba, uno de los principales motivos que llevó al fracaso a las primeras Google Glasses fue las dudas sobre la protección de la privacidad; teníamos unas gafas con cámara incorporada capaz de grabar o tomar fotos en cualquier momento, sin el consentimiento de las personas y, además, de subirlas a la Red o transmitirlas en directo.

Este problema, que entraña riesgos para la protección de datos, sigue muy presente en el desarrollo de los diferentes modelos de Smart Glasses. Aunque el desarrollo de esta tecnología y las funcionalidades que la acompañan serán de gran utilidad en futuro no muy lejano para la sociedad, también traen consigo problemas para la privacidad tanto del portador como del resto de la gente, que deben tratarse desde ya.

Concretamente, el Grupo de Trabajo del Artículo 29 pusieron de manifiesto las siguientes vulnerabilidades de las Google Glasses (y que podemos extrapolar al resto de Smart Glasses):

  • Posibilidad de hackeo con cambio del sistema operativo.
  • Manipulación mediante lectura de códigos QR.
  • Posibilidad de acceso a imágenes tomadas en la casa del usuario.

Así, los principales desarrolladores de Smart Glasses tienen actualmente en cuenta las normas del RGPD y del ePrivacy. Sin embargo, sigue siendo necesario prever un sistema que cubra al máximo posible los riesgos específicos derivados del uso de estas gafas inteligentes y que incorpore soluciones adicionales como:

  • Prohibición de incorporar cámara (salvo autorización especial para Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, equipos de vigilancia, etc.)
  • Diseño estandarizado o con exigencia de algún elemento diferenciador que permita a los no-usuarios distinguirlas de gafas comunes
  • Almacenamiento local (en oposición a cloud)
  • Reforzamiento del sistema operativo y reporte automático y continuo de brechas de seguridad
  • Formación previa de los usuarios.

Resumen

Las Smart Glasses llegarán más pronto que tarde al resto de usuarios, saliendo de esa esfera profesional que ahora cubren, por ello es imperativo que en su diseño y desarrollo se tengan en cuenta los posibles riesgos que pueden suponer para la privacidad de sus usuarios y del resto de la sociedad.

Aunque no hay nada oficial, y no tendremos unas nuevas Google Glasses en 2020, Google podría estar ya trabajando en el desarrollo de una nueva versión de sus gafas para el gran público, su reciente adquisición de North (creadores de las gafas inteligentes Focals North) y el registro de varias patentes relacionadas con ellas parecen apuntar en esa dirección. Veremos entonces cómo se solucionan esas dudas respecto a la privacidad que traen consigo no solo estas gafas, sino todo lo concerniente al Internet de las cosas (IoT).

Escribe aquí tu comentario

Deja un comentario

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.

Las siguientes reglas del RGPD deben leerse y aceptarse:
Este formulario recopila tu nombre, correo electrónico y contenido para que podamos realizar un seguimiento de los comentarios dejados en la web. Para más información revisa nuestra política de privacidad, donde encontrarás más información sobre dónde, cómo y por qué almacenamos tus datos.