Casi siempre que hemos hablado de Big Data en Ayuda Ley y Protección de Datos, hemos hecho referencia a las ventajas competitivas que puede aportar el análisis masivo de datos a las empresas, pero las aplicaciones de Big Data encuentran cabida en otros muchos sectores, que pueden sacar partido del empleo de sus técnicas de análisis y extracción de información relevante. En esta entrada veremos algunos de esos sectores donde el Big Data ha llegado para quedarse.
El Big Data se aplica en varios sectores específicos. Veamos cómo
El Big Data y sus aplicaciones no son solo algo de lo que puedan beneficiarse las empresas, aunque muchas veces es el principal uso del que oímos hablar; conceptos, tecnologías y aplicaciones del Big Data destinadas al almacenamiento, procesamiento y análisis inteligente de cantidades masivas de datos para descubrir patrones en los comportamientos de usuarios y clientes, con los que poder hacer predicciones y ofrecer experiencias más personalizadas.
Sin embargo, y como ya hemos comentado en algunas de nuestras entradas de Big Data, sus técnicas pueden emplearse en otros ámbitos más allá del Big Data para empresas, para mejorar la vida diaria de las personas con la llegada de las smart cities, por ejemplo. O aplicaciones de Big Data en medicina.
Y es que todas las ventajas que aporta el análisis de datos a las compañías privadas, también se pueden extrapolar a sectores tan dispares como el marketing, el mercado inmobiliario, la investigación científica o el deporte. Los datos encierran información muy valiosa, que si sabe extraer y poner en contexto, puede ayudar no solo a conseguir beneficios económicos, sino también sociales.
Aplicaciones del Big Data a diferentes sectores
Aplicaciones que usan Big Data podemos emplearlas básicamente en cualquier sector, puesto que el análisis de datos, especialmente con la llegada el IoT (Internet de las cosas), puede aportar información muy valiosa, tanto al ámbito privado como al público.
Por ejemplo, si una tienda online conoce a qué horas es más probable que sus clientes hagan compras, podrá crear una estrategia de comunicaciones de ofertas personalizadas en torno a esos horarios. O a través del estudio de los datos los delitos que se cometen en una ciudad, es posible crear estrategias destinadas a reducir el crimen basadas en las conclusiones extraídas de los datos.
A continuación veremos varios sectores que emplean ya aplicaciones con Big Data y que seguirán haciéndolo en el futuro.
El Big Data aplicado al Marketing
Si hay un sector que está aprovechando las aplicaciones del Big Data, es el del marketing.
Gracias al Big Data aplicado al marketing, es posible obtener información detallada respecto a los gustos del público objetivo, sus preferencias e incluso comportamientos. Esto ayuda a realizar una mejor segmentación de los clientes potenciales y crear modelos predictivos basados en los patrones y relaciones descubiertas en el análisis de datos.
Además, una buena estrategia de marketing necesita medir el impacto y respuesta real que obtienen sus campañas; a través del uso de diferentes KPIs (indicadores clave), pueden determinar el nivel de éxito de una campaña en concreto, la aceptación de un producto y las ventas potenciales. Todo esto está basado en la recogida de datos y su análisis.
Vida personal
Aunque posiblemente no somos muy conscientes de ello, las aplicaciones del Big Data están muy presentes ya en nuestra vida personal, desde el uso del GPS o Google Maps con el que ya hemos prescindido de las guías de carretera físicas, pasando por las sugerencias de productos que nos hace Amazon o Netflix con sus series o películas recomendadas ofrecernos experiencias más personalizadas, basadas en el análisis de nuestros datos, hasta el suministro de energía inteligente en las ciudades.
Salud Pública
Sin duda, 2020 ha sido el año en el que el Big Data aplicado a la salud pública ha cobrado mayor importancia debido al Covid-19, puesto que a través del análisis de datos no solo se logran crear estadísticas sobre enfermedades para estudios médicos, sino que también puede ayudar a estudiar patrones de propagación de enfermedades infecciosas, pudiendo generar modelos predictivos para determinar cuándo es probable que se produzca un brote o rebrote entre la población de una zona en concreto.
Otras aplicaciones del Big Data en el ámbito de la sanidad las encontramos en la decodificación del ADN, la detección de posibles enfermedades antes de presentar síntomas o qué tratamiento es más adecuado para un paciente, incluso que alimentación nos conviene más. Así mismo, sirve a las administraciones para, por ejemplo, determinar que áreas de salud o investigación médica pueden necesitar más recursos e inversión para mejorar el sistema.
Deporte
El mundo del deporte también se ha visto «invadido» por las aplicaciones de Big Data. Casi seguro que tú o alguien que conoces lleva una smartbanf o un smartwach; estos dispositivos inteligentes recogen toda una serie de datos relacionados con nuestro estado físico (pulsaciones, calorías quemadas, pasos dados, nivel de oxígeno en sangre, tensión, incluso miden nuestro patrón de sueño).
El análisis de estos datos puede emplearse para comprobar el impacto de las rutinas de entrenamiento tanto en deportistas no profesionales como en aquellos niveles más profesionales, como las aplicaciones de Big Data en el fútbol, que pueden ayudar a mejorar rendimientos, técnicas, establecer rutinas de entrenamiento adecuadas al deportista y los objetivos que se quieran conseguir, recuperar lesiones de una forma más eficaz, etc.
Ciencia e Investigación
La ciencia y la investigación son también uno de los sectores donde mayor provecho se puede sacar del análisis de datos, especialmente de proyectos en los que se generan grandes cantidades de datos. Pero además, la aplicación de algoritmos de inteligencia artificial a los motores de búsqueda han mejorado la búsqueda y selección de datos e información científica, agilizando el proceso y trabajo de los investigadores.
Seguridad informática
La ciberseguridad también puede sacar partido de las aplicaciones del Big Data, puesto que gracias al análisis inteligente de datos es posible establece posibles relaciones ocultas, detectar patrones de conducta y prevenir amenazas a la seguridad. No solo hablamos de predecir y prevenir ataques en base a la información extraída de los datos, sino también prevenir el fraude gracias a la comprobación en tiempo real del historial de una cuenta, lo que puede ayudar a detectar el comportamiento anómalo de un usuario o una transacción sospechosa.
La información que aporta el Big Data en el sector de la seguridad informática gracias al análisis del tráfico de la red, puede ayudar a descubrir amenazas y prevenir ataques de hackers, el espionaje industrial, el fraude cibernético e incluso el ciberterrorismo. En este caso, podemos decir que el análisis de datos masivos puede ayudar a salvar vidas cuando se evita el ciberataque a sistemas e infraestructuras críticas.
Cumplimiento legal
A veces puede resultar complicado estar al día de todas las leyes y normativas que pueden afectar a una empresa y su cumplimiento legal, gracias al Big Data y las posibilidades de predicción que ofrece el estudio de datos, es posible que las empresas puedan adelantarse y prepararse a nuevos cambios en las leyes.
Además, pues que el Big Data de nutre también de datos personales, no podemos olvidarnos de cumplir con la normativa de protección de datos y las plataformas y aplicaciones de Big Data pueden ayudarnos con ello, asegurando la seguridad, integridad y privacidad de los datos que manejamos a través de ellas.
Urbanismo y ciudades inteligentes
Con la incorporación de cámaras y sensores de diferentes tipos en las ciudades y la evolución del IoT, cada vez se recopilan más datos con los que se puede mejorar el día a día de los ciudadanos. El Big Data está detrás de muchos proyectos de ciudades inteligentes, pero más cercano tenemos la mejora en la gestión del transporte público a través del análisis de datos que permiten planificar, gestionar y regular la movilidad, así como la gestión del tráfico o la reducción del crimen.
Así mismo, también se emplea para mejorar la habitabilidad de las ciudades, reducir el impacto medioambiental de la población o determinar en qué zonas es necesario reforzar o mejorar ciertas infraestructuras. Además, pueden ayudar a predecir posibles averías o cortes de suministro y reducir el tiempo de respuesta cuando estos se producen.
Educación
La educación también puede sacar partido a las aplicaciones de Big Data, puesto que a través del análisis de datos proveniente de sus alumnos, es posible identificar estudiantes en riesgo, llevar un progreso de una clase en conjunto, descubrir problemas ocultos dentro del sistema o el plan de estudios, mejorar los sistemas de evaluación o mejorar el apoyo a docentes.
Ampliando un poco más la mira, el análisis de datos puede ayudar a comparar zonas educativas entre sí y encontrar las razones que marcan las diferencias entre ellas, para poder buscarles soluciones.
Aplicaciones financieras
El sector de financiero también emplea las aplicaciones de Big Data, concretamente en tres áreas muy concretas: el análisis de riesgos, que les permite predecir qué clientes tienen más posibilidades de no devolver un préstamo; la evaluación de la experiencia del cliente, para mejorar el servicio en base a sus necesidades y nivel de satisfacción; y la optimización de operaciones, especialmente de procedimiento internos, como asegurar el funcionamiento y seguridad de la banca electrónica.
Además, a través del deep learning, los bancos pueden detectar actividades fraudulentas y mejorar su seguridad y la de sus clientes.
Turismo
El sector del turismo tampoco es ajeno a las aplicaciones del Big Data y se emplean para recoger y analizar información sobre los turistas, dónde viajan más, qué preferencias tienen respecto a dónde comer, qué visitar o dónde pernoctar y qué hay detrás de esas decisiones. Estos conocimientos ayudan a los negocios de este sector a ofrecer servicios más ajustados a las necesidades de sus clientes.
Mercado inmobiliario
El sector inmobiliario también puede beneficiarse del análisis de datos de muy distinta índole. Así, las aplicaciones del Big Data inmobiliario tienen su utilidad para que las compañías puedan tomar decisiones, por ejemplo, sobre dónde invertir en la adquisición de viviendas para su venta. Además, se emplea para conseguir y proporcionar información sobre las propiedades, el coste actual y su evolución a lo largo de los años, incluso de cara al futuro, detalles sobre la zona en la que se ubican, calcular el coste de una hipoteca, etc.
Resumen
Resumiendo, las aplicaciones del Big Data pueden llevarse a cualquier sector para obtener beneficios económicos, sí, pero también para mejorar la vida de las personas, mejorar la seguridad ciudadana y cibernética y proteger la salud pública. El análisis de datos masivos permite no solo descubrir patrones de consumo, también predecir eventos y situaciones para las que prepararse y poder responder.
Como decíamos al principio, el Big Data ya está aquí y, de momento, ha llegado para quedarse.
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