La ciberseguridad es una de las principales preocupaciones de muchos negocios en la actualidad. Las empresas quieren y necesitan estar protegidas frente a las nuevas y constantes amenazas que surgen en el entorno online y blindarse frente a los ciberdelincuentes. Para ello, resulta fundamental detectar vulnerabilidades en la empresa y actuar lo más rápido posible para corregirlas. Pero, ¿qué son estas vulnerabilidades? ¿Qué actuaciones se pueden llevar a cabo para subsanarlas?
¿Qué son las vulnerabilidades?
Una vulnerabilidad se define como un fallo o deficiencia en un programa o sistema informático que puede ser explotado por los ciberdelincuentes, provocando que aumente el riesgo de que se produzcan intromisiones ilegítimas en los equipos de una empresa.
Las vulnerabilidades informáticas son como una puerta abierta que permite el acceso remoto a los equipos de la empresa de personas no autorizadas, las cuales son susceptibles de llevar a cabo operaciones no permitidas y de un elevado riesgo para la ciberseguridad, tales como robo de información, instalación de malware, acceso a cuentas bancarias, etc.
Este tipo de vulnerabilidades se pueden producir a causa de una amplia variedad de factores:
- Errores a la hora de configurar redes, programas o sistemas.
- Gestión de recursos deficiente que provoca que ciertos programas consuman demasiados recursos.
- Fallos a la hora de validar la información introducida en las bases de datos de los equipos.
- Errores humanos a causa de negligencias voluntarias o involuntarias.
- Falta de rigor en el control de acceso o a la hora de otorgar permisos.
- Software y equipos desactualizados u obsoletos que no cuentan con las medidas de seguridad adecuadas.
- Etc.
Estos son solo algunos de los motivos de pueden dar lugar a fallos de seguridad informáticos. Pero, ¿por qué es tan importante detectar vulnerabilidades y cómo hacerlo?
¿Por qué las empresas deben detectar las vulnerabilidades a las que están expuestas?
La razón más evidente por la que las empresas deben detectar vulnerabilidades informáticas es para mejorar la ciberseguridad y para reducir los riesgos de que se produzcan intromisiones ilegítimas en sus equipos. La detección de vulnerabilidades tiene más que ver con la prevención que con la resolución de problemas, es decir, su objetivo primordial es no es solucionar fallos, sino evitar que estos se produzcan.
Otro motivo es que las actuales normativas sobre ciberseguridad y protección de datos obligan a las empresas a establecer mecanismos para evitar fallos o deficiencias que puedan revelar información confidencial o que suponga una violación de los derechos y libertades de los individuos.
Por otro lado, contar con un protocolo adecuado para detectar vulnerabilidades es un factor clave para implantar una cultura de la ciberseguridad en la empresa. Gracias a ello, las empresas pueden comprender mejor los riegos que afectan a su negocio y perfeccionar sus sistemas de prevención en base a la experiencia.
¿Cómo pueden las empresas detectar sus vulnerabilidades?
La pregunta más obvia es cómo identificar vulnerabilidades en las empresas. En ocasiones, cuando no existen las medidas adecuadas, los fallos no se descubren hasta que se ha producido la intromisión ilegítima, normalmente con consecuencias negativas para la empresa. Sin embargo, en este caso lo que se busca es cerrar la puerta a que estas intromisiones se puedan producir. Para ello es frecuente el empleo de un escáner de vulnerabilidades. Estas herramientas funcionan de la siguiente manera:
- Detección de la vulnerabilidad: se realiza una prueba de vulnerabilidades para evaluar el estado de programas y equipos informáticos, con el objetivo de detectar posibles brechas de seguridad.
- Clasificación de la vulnerabilidad: los fallos o deficiencias detectadas se clasifican para ayudar a los profesionales informáticos a establecer un orden de prioridad, en relación a la gravedad de la brecha de seguridad, de la extensión en el tiempo o de la cantidad de intromisiones no autorizadas que ha provocado.
- Resolución del problema: la mayoría de escáneres de vulnerabilidades proporcionan información básica sobre los fallos o deficiencias de seguridad, lo que permite a los responsables de ciberseguridad de las empresas ir un paso más allá y contar con información relevante para resolver el problema.
El análisis de vulnerabilidades
En primer lugar, ¿qué es un análisis de vulnerabilidades? Se trata de un proceso mediante el cual se identifican, definen, clasifican y priorizan las debilidades de programas o sistemas informáticos, con el objetivo de evaluar posibles amenazas y establecer mecanismos de reacción adecuados frente a ellas.
Generalmente, son las grandes compañías quienes están más expuestas a mayor número de ataques informáticos, por lo que también son las que más requieren de este tipo de análisis. Sin embargo, toda organización está expuesta a sufrir este tipo de ciberataques, por lo que cualquier empresa debería realizar análisis de vulnerabilidades de forma periódica ya que las medidas de seguridad implementadas pueden quedarse obsoletas o no ser lo suficientemente férreas.
La gestión de vulnerabilidades
Mientras que el análisis de vulnerabilidades es una acción concreta y puntual, la gestión de vulnerabilidades es un proceso continuo que se basa en la implantación de las medidas adecuadas para realizar una supervisión y monitorización continua de equipos y programas informáticos, con el objetivo de detectar, mitigar o corregir brechas de seguridad que se puedan producir en cualquier momento, así como establecer las bases para implementar estrategias defensivas efectivas frente a fraudes, robos de información y otras operaciones no autorizadas.
¿Cómo realizar la gestión de vulnerabilidades en la empresa?
Para realizar una gestión de vulnerabilidades adecuada es necesario seguir los siguientes pasos:
- Definir el alcance de las vulnerabilidades: se trata de conocer el tipo de vulnerabilidad, a qué equipos afecta o cuáles pueden ser las consecuencias negativas de esta brecha de seguridad para la empresa.
- Crear procedimientos para subsanarlas: en base a las brechas de seguridad detectadas, se deben unas políticas de actuación concretas y definidas, basadas en procedimientos estándar fijos que permitan resolver de manera rápida y efectiva vulnerabilidades de forma conjunta, sin necesidad de ir resolviendo una por una (siempre que esto sea posible).
En base a los análisis de realizados con los escáneres de vulnerabilidades se definirá el alcance de las mismas, el software necesario para erradicarlas, o los pasos a seguir para mantener los equipos seguros en el futuro.
Beneficios de la gestión de vulnerabilidades en la empresa
Contar con un adecuado protocolo para detectar vulnerabilidades se ha convertido en una de las prioridades de muchas empresas, sobre todo en aquellas de mayor envergadura o que, por la naturaleza de sus operaciones, están más expuesta a los ataques de ciberdelincuentes. Algunas de las principales ventajas de la gestión de vulnerabilidades son:
- Se trata de un proceso continuo que permite detectar las vulnerabilidades a tiempo y proteger de manera constante y en tiempo real a la empres ante posibles brechas de seguridad.
- Permite crear una visión global del estado de la empresa en materia de ciberseguridad y tener identificadas aquellas puertas abiertas que pueden ser usadas por los atacantes.
- Existen numerosas herramientas relacionadas con la detección y gestión de vulnerabilidades que trabajan en la nube, que son sencillas de implementar y que no consumen recursos propios de la empresa.
- Favorece la propia formación del personal en materia de seguridad, orientando a empleados y colaboradores de la empresa sobre políticas y prácticas recomendables, facilitando así la labor del área de ciberseguridad y creando una cultura de seguridad en la empresa.
- Es una de las claves básicas para la continuidad de los negocios. Las consecuencias negativas provocadas por las brechas de seguridad pueden provocar serios problemas a las empresas, sobre todo cuando se producen de forma inesperada. Por ello, la prevención en materia de ciberseguridad es uno de los grandes aliados para la viabilidad futura de una empresa.
En definitiva, detectar vulnerabilidades informáticas no es un capricho o algo propio solo de las grandes compañías. Los ciberdelincuentes emplean cada vez herramientas y técnicas más sofisticadas para encontrar puertas abiertas en las empresas y, por ello, cada vez es más importante contar con los procedimientos y herramientas adecuadas para defenderse.