Desde la entrada en vigor del RGPD y la LOPDGDD las empresas han de tener especial cuidado con el tratamiento de datos de usuarios con fines de marketing y publicidad. Una de las medidas más recomendadas para respetar la normativa es usar el proceso de doble opt-in a la hora de crear listas comerciales de emails. Pero, ¿en qué consiste esta técnica?
¿Qué es el doble opt-in?
Opt-in (optar por, en castellano) es como se denomina la acción de un usuario de suscribirse a un boletín, newsletter o lista de correo de forma voluntaria, normalmente a través de un formulario insertado en un sitio web.
A primera vista podría parecer que tal acción es suficiente para sustentar el consentimiento que la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD) y la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico (LSSI-CE) exigen para legalizar el envío de comunicaciones comerciales, pero sin embargo hemos de tener en cuenta que con sólo esto no podemos tener la absoluta seguridad de que el dueño de tal dirección electrónica es quién ha introducido ese dato. Cualquiera de nosotros conoce decenas, cientos o incluso miles de correos electrónicos que podrían ser inscritos en un formulario sin que su legítimo poseedor haya prestado consentimiento alguno.
Es por ello que para asegurarse la procedencia legítima, se recurre al envío de un mensaje que mediante una acción expresa (hacer clic en un botón o en un enlace, como en la imagen que acompaña este artículo) pide confirmar el deseo de suscripción. Esto es lo que se denomina doble opt-in.
En el proceso de doble opt-in el usuario primero introduce sus datos en un formulario (primera capa). Sin embargo, esto no basta para que sea añadido a la lista de correos de la empresa. Para ello deberá confirmar su alta a través de un email de activación que será enviado a su correo electrónico (segunda capa).
Diferencias entre doble opt-in y opt-in sencillo
La principal diferencia entre el doble opt in y el opt in estándar es que el doble opt-in añade una segunda capa de seguridad a la hora de confirmar el alta en una lista de emails comerciales, ya sea para recibir boletines, newsletters o información sobre productos.
Con el opt-in tradicional, la persona otorga su consentimiento introduciendo sus datos en un formulario. Una vez que ha rellenado dicho formulario, pasa a formar parte de los contactos de la empresa. Sin embargo, ¿quién asegura que los datos introducidos son verídicos o pertenecen realmente al usuario?
Con el double opt-in el usuario, además de rellenar el formulario, debe confirmar su consentimiento en una segunda capa, en la que se le envía un email de activación. Este correo electrónico contiene un botón con un mensaje de confirmación de alta en la lista de correos comerciales, por ejemplo «Deseo suscribirme al boletín» o «Confirmar mi suscripción a newsletter«.
¿Y qué es el opt-out?
El opt-out se refiere a los métodos de los que dispone el usuario para evitar recibir publicidad o comunicaciones comerciales no deseadas. Generalmente está asociado a las estrategias de email marketing, publicidad en línea o colocación de cookies en el navegador.
Al contrario que con el doble opt-in, el uso del doble opt-out no tiene sentido ya que lo que se busca es que el usuario pueda darse de baja del servicio o dejar de recibir publicidad a través de un proceso lo más rápido posible.
Ventajas del proceso de doble opt-in
A continuación vemos los múltiples beneficios del doble opt-in para conseguir direcciones de correo electrónicos de usuarios.
Obtener contactos cualificados
Cuando un usuario facilita su dirección de correo electrónico a través de un proceso de doble opt-in, puedes estar seguro de que está realmente interesado en lo que le ofreces. De esta forma puedes decir adiós a los suscriptores que no abren tus emails, mejorando la tasa de apertura de correos electrónicos y el rendimiento de tus campañas de email marketing.
Aumentar la seguridad
Con el proceso de doble opt in se pueden evitar problemas o errores a la hora del registro. Además, la segunda capa de seguridad obliga a que el usuario acceda a su correo electrónico para confirmar la suscripción, lo que garantiza que realmente se trata de un usuario real y veraz. Es decir, se minimiza al máximo la suscripción de personas con datos falsos o usando correos electrónicos que no les pertenecen.
Cumplir con la normativa de protección de datos
Desde la entrada en vigor del RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) es necesario obtener consentimiento explícito, inequívoco y voluntario para el tratamiento de los datos personales de los usuarios. Mediante el proceso de doble opt-in se garantiza que este consentimiento es otorgado de acuerdo a la ley, ya que se solicita una doble confirmación al usuario.
Iniciar de forma óptima la relación con los nuevos contactos
El envío del email de confirmación es la primera toma de contacto con los nuevos usuarios y clientes potenciales. Sin embargo, no tiene por qué ser un simple correo con un botón de activación. Se puede aprovechar esta comunicación para crear un correo de bienvenida que ofrezca una experiencia más personalizada, con el objetivo de causar una buena primera impresión y comenzar a enganchar y fidelizar a los usuarios.
Aumentar la tasa de apertura de los correos electrónicos
Otra de las ventajas del doble opt-in en el marketing es que mejora la entregabilidad de los correos. Por un lado, aseguran que el usuario está interesado en los productos o servicios que ofreces, ya que dieron ese paso extra de confirmar su solicitud. Por otro, se reduce al mínimo la tasa de rebotes duros o hard bounces, que son aquellos correos que no se entregan al destinatario (por ejemplo, porque dio una dirección de correo falsa) o que van directamente a la carpeta de spam.
Difundir la marca
Es cierto que el correo electrónico de confirmación no está destinado a aplicar técnicas de marketing, sino que es un paso previo para empezar a impactar al usuario. Pero esto no implica que no sea un buen momento para empezar con las labores de branding, ofreciendo información sobre la marca o el servicio.
Cómo implementar el doble opt-in para crear listas de correos comerciales
En la actualidad la mayoría de las herramientas de email marketing (por no decir todas) ofrecen la opción de incluir el proceso de doble opt-in para crear listas comerciales. Plataformas como Mailchimp, Mailrelay o SendInBlue cuentan con opciones para automatizar todo este proceso, de manera que si el usuario solo será añadido a la base de datos si pincha en el botón del correo de activación.
Seguro que en la propia bandeja de entrada de tu email puedes encontrar ejemplos de doble opt-in. Simplemente busca algún correo de alta en un servicio y verás cómo la mayoría de ellos incluyen un correo de activación. Es decir, primero introdujiste tus datos para darte de alta, y luego tuviste que activar ese correo para confirmar el alta en el servicio.
En definitiva, el doble opt-in no solo ayuda a cumplir con la normativa, sino que es básico a la hora de mejorar la seguridad, la capacidad de entrega y, en definitiva, para mejorar el rendimiento de las campañas de marketing.